Dunbar Rock funciona actualmente como un centro de buceo pero se trata de una isla privada en medio del mar Caribe, que puede ser tuya por 1,5 millones de euros. Se trata de una villa de lujo construida a 30 metros de altura sobre una roca de 1,2 hectáreas en uno de los parajes más impresionantes del Caribe: Las Islas de la Bahía, en Honduras.
Dunbar Rock es ideal para aquellos que quieren su propia isla privada, pero que desean estar cerca de un gran aeropuerto. Rodeada por un arrecife de coral la isla se convierte en un lugar de recreo único en el mundo.
Cuenta la leyenda que fue utilizada por el famoso pirata Barbanegra y que en sus entrañas hay un tesoro enterrado. Si bien, cuando el propietario estaba construyendo las villas, descubrió una cueva escondida en la isla y encontró muchas piezas de cerámica precolombina, lamentablemente no encontró ningún otro tesoro.
La isla tiene un pequeño bosque de robles que proporciona sombra cuando el sol aprieta. Cuenta con un jardín de lo más pintoresco. Es muy fácil acceder a Dunbar Rock ya que sólo se encuentra a 10 minutos en barco desde el aeropuerto de Guanaja. Al aeropuerto llegan vuelos directos desde Houston o Texas. La trayectoria de vuelo para las aeronaves se sitúa al otro lado de la isla, por lo que la isla conserva la discreción y la tranquilidad.
Dunbar Rock es ideal como villa privada, retiro vacacional, o como inversión para aquellos que buscan adquirir una pequeña empresa en los trópicos. Tiene unas vistas únicas al mar y aún más espectaculares a cualquiera de las Islas que componen la Bahía. La villa se encuentra en lo alto de un pináculo de roca de 30 metros de altura en medio de Sandy Bay, apenas a 500 metros del final del muelle de la isla principal. En su construcción se invirtieron dos años, debido principalmente a la dificultad del terreno, su estructura es de madera y un tratamiento especial de cemento para soportar el aire salado.
Un auténtico lujo en medio del mar.
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